Revista Del Valle (Edinburg, Tex.), Vol. 1, No. 50, Ed. 1 Sunday, May 16, 1915 Page: 3 of 4
four pages : ill. ; page 20 x 14 in. Digitized from 35 mm. microfilm.View a full description of this newspaper.
Extracted Text
The following text was automatically extracted from the image on this page using optical character recognition software:
REVISTA DEL VALLE
Tienda
Venga a comprar a nuestra
Donde será siempre bien (rutado
Nosotros le devolveremos lo que vale su dinero
ROPA
Sombreros
CALZADO
Ropa interior
Calcetines
Corbatas
CAMISAS
CUELLOS
PAÑUELOS
TIRANTES
CINTOS
CACHUCHAS
MEDIAS Calzado de Niño Calzado de Señora
Velices
Bolsas de Mano
Pantalones
> anmlmles j
Géneros paro el Verano
i
i
i
i
La Casa que tiende mée barato, Emfuina Washington y alíe 11. ot Texas
NIIVI3MO Company
■ ■><> n» *'"<»•! «p M — ■ IP
MUSICA LEJANA
Tres muertes
Ya se van las campanas, ya van cantando
el postrer villancico de Noche Buena;
¡ay de aquellos Mué el goce de otra es|>erando.
Ies sorprenda viniendo de luto llena!
Habrá en la mesa un sitio triste y desierto
donde falte la copa de la alegría,
y sonará a campana que toca a muerto
el choque de los vasos entre la orgia.
Músicas que a lo lejos aún resonáis
con vagedad de ensueno Que alhaga y hiere;
y que en vuestras notas algo lleváis....
de eso Mué siente el alma por lo que muere:
parad ante las rejas un solo instante
y gozad de la dicha las frescas rosas;
Quizás cuando de nuevo paséis delante
no hallaréis tras los hierros a las hermosas!
Hinzad nuevas canciones de Noche Buena
que oigan los corazones estremecidos
norque ya estaréis mudas ante la pena,
como mientras la lluvia callan los nidos.
La juventud alegre tiene cien alas
liara cruzar sus cielos deslumbradores,
y hay que atar de sus cintas, lazos y galas
el carro rubicundo de los amores.
Parad ante su gloria, músicas bellas;
aún rutila el lucero de la mañana,
y cual notas de un himno van las estrellas,
mariposas azules, en caravana.
“¡Amad —decid~la risa las ilusiones,
las tradiciones santas y ceculares,
las guitarras que llevan en sus bordones
del pueblo los anhelos hechos cantares!”
No os vayáis leves sones Mué el aire mece,
borrando en nuestro (lecho las alegrías ...
ya Sirio tiajn al monte y es Mué fenecí*
esta noene de vagas melancolías.
En qué hogar cuando vuelva, no habrá canciones,
ni vibrarán los himnos q ue.antes sonaron?
¿en Mué liras humanas, los corazones
no cantarán las cnerdas que antes cantaron?
¡Oh, madre Mm* <>n tus brazos tenerme ansias!
Soneto orgulloso
i
Este era un enorme ceibo Mué sabía
erguir con altivez su ramazones,
sombra redor a peregrinaciones
Dominando la yerma lejaníu
alzóse como un reto a los ciclones
y pobló de bucólicas canciones
la soledad que en el sendero había.
Tres días el labriego, sin rej>oso
fué su robusta base destroncando.. ..
y antes de que rodara aquél coloso |
Por las rutas polvosas y desiertas,
cual si se viera agonizar llorando
pasó la lluvia de sus hojas muertas.
II
Por el cauce de breves arroyuelo*
hacia los oam|Nis dilatóse el río,
y vibra en el escaso lomerío
un laberinto aereo de revuelos
('orno un lamento que tusara duelos
susurra el viento en el mangal sombrío,
y sobre la miseria del crío
luce intacto el zafiro de les cielos.
Allá, donde flotando va la zarza,
airosa y lenta irisase una garza ...
suena el disparo y solamente queda.
Abierto y palpitante en los zarzales,
un abanico de alabastro y seda
cruzado por un hilo de colares.
' III
Pasó el ruido del viento en la esis*sura
« orno nn eco de músicas extrañas,
(|>K IUCHKF1N)
Kl hombre de sus males es culpable,
l¿a vida es un combate encarnizado,
. y al Justo que se encuentra desarmado
suele herir a traición el miserable.
Para esquivar de la calumnia el sable
se debe acorazar el hombre honrrado,
o llevar, cual los Santos, resguardado,
el cuerpo con cilicio impenetrable.
Por esto, cuando alguno me amenaza,
mi orgullo es el cilicio y la coraza
con que mi pecho su ruindad se esconde
¡No tiene esta coraza un agujero!
•¡Queréis Morir ini corazón? ¡Primero
es necesario que busquéis por dónde!
ItlCAUIH» .1. ( 'ata ki n i,i
En el inusiKi de Kulak. Egipto, se conserva
un pufko de madera que formó parte de un ¡ihumen
de plumas del siglo XVI HA J )
H)s abanicos plegables los inventaron los jais»
n ese sen el siglo VIII d** nuestra ere.
y un toro, Mué era el rey do mis montar.**,
agonizaba soloen ia nalura
¡oh, uán temida fuera su bravura.
Si tuvo en sus múltiplo* hazañas,
la de partir a un tigre la* ••ntrena*
y hacer fraginen’»*, de su piel obscura'
Dormítáliaso lánguido .y serení»,
cuando, al desliz, entre los camalote*
inyectóle una vi*hi i el veimno!
V’ ul caer m<<i ndo en los rastro.* -
vasta ronda de i jros zopilotes
fné la visión po»* ••n» de su* ojos!
I w KX (¡AltCIA Jl M Ml«>.
ontigo tendrá música un Noche Buena;
.pues con que tu me mire* y te sonrías,
mi al Ea de artista vibra y resuena!
SALVADOR RUEDA
. X „ 1
Upcoming Pages
Here’s what’s next.
Search Inside
This issue can be searched. Note: Results may vary based on the legibility of text within the document.
Tools / Downloads
Get a copy of this page or view the extracted text.
Citing and Sharing
Basic information for referencing this web page. We also provide extended guidance on usage rights, references, copying or embedding.
Reference the current page of this Newspaper.
Mascorro, Luciano, Jr. Revista Del Valle (Edinburg, Tex.), Vol. 1, No. 50, Ed. 1 Sunday, May 16, 1915, newspaper, May 16, 1915; (https://texashistory.unt.edu/ark:/67531/metapth850372/m1/3/: accessed July 17, 2024), University of North Texas Libraries, The Portal to Texas History, https://texashistory.unt.edu.; .